Introduciendo la paz natural en el aula

“Solía tener dolores de cabeza, pero ya no he vuelto a tenerlos", nos comenta Isa Oriabure Andersson, que imparte clases de sueco y español. 

Cuando llegamos a Västervångskolan, en la ciudad de Landskrona, al sur de Suecia, Isa Oriabure Andersson estaba impartiendo una lección de sueco. En el aula 8C están haciendo ejercicios de gramática y aprendiendo a utilizar el los artículos definidos e indefinidos posesivo definido e indefinido. De los 21 alumnos de la clase, algunos trabajan de forma independiente en sus ejercicios y otros realizan debates en pequeños grupos.

El nivel de ruido fluctúa, pero incluso cuando muchas personas están hablando simultáneamente, el sonido se silencia. A pesar del suave murmullo, Isa puede hablar a un volumen normal mientras va de mesa en mesa para ayudar a sus alumnos. Cuando se le pide que describa la sensación acústica en el aula, recurre a una metáfora de la naturaleza:

“Es como cuando acaba de nevar y se forma una alfombra de nieve que amortigua todo y crea una sensación agradable y tranquila. Sientes que puedes susurrar y todos te escucharán. Es un sentimiento bastante liberador. Me imagino en el campo, rodeado de cantos de pájaros. No es realmente así en el aula, por supuesto, pero así es como describiría esa sensación.”

La base de comparación pronto desapareció

La historia detrás del entorno laboral mejorado para el personal y los alumnos comenzó hace algunos años cuando Thorn, una compañía de iluminación, quería realizar un estudio sobre cómo la iluminación afectaba a los alumnos y, más particularmente, el consumo de energía en Västervångskolan. Cuando se instaló la nueva iluminación, se necesitaba un techo que reflejara la luz. Thorn se puso en contacto con Saint-Gobain Ecophon, quien notó de inmediato que los absorbentes acústicos también eran necesarios para manejar los niveles de ruido en el aula (ver recuadro).

Se excluyó un aula del proyecto para utilizarla como base de comparación con las aulas mejoradas. Cuando el personal regresó al trabajo después de las vacaciones de verano, inmediatamente notaron la diferencia, especialmente en los niveles de ruido.

El objetivo del proyecto pronto cambió: del ahorro energético a la mejora acústica y del entorno de trabajo. El aula sin mejoras que sirvió como base de comparación desapareció antes de lo que nadie podría haber imaginado. El municipio perdió poco tiempo para financiar mejoras en el entorno acústico, inicialmente para el resto de las aulas de Västervångskolan y después para todas las escuelas en Landskrona.

"Hemos notado una importante diferencia", dice Andreas Hellmer, profesor adjunto. "El ambiente para la enseñanza ha mejorado mucho, por lo que podemos enfocarnos en nuestro trabajo: enseñar a nuestros alumnos.” 

Dividing lessons from breaks

Un total de 15 aulas en Västervångskolan ahora cuentan con una mejor acústica e iluminación.

"Como asistente del director, no paso mucho tiempo enseñando en las aulas, pero estoy mucho dentro y fuera de ellas. Me doy cuenta claramente de cómo el mundo exterior está desconectado y ahora una sensación de calma se respira en estas aulas. Hay una clara separación entre las lecciones y los tiempos de descanso. El entorno acústico indica que es hora de ponerse a trabajar."

La buena acústica y la iluminación crean las condiciones adecuadas para que tanto el personal como los alumnos desempeñen mejor su función y rindan más. Andreas Hellmer está notando los beneficios.

“A los profesores les gusta ir a dar clase. Hay una mayor satisfacción laboral, gracias en parte a la mejora del entorno acústico. La iluminación es muy importante también. Los nuevos accesorios de iluminación en las aulas producen una luz suave similar a la luz natural."

Los alumnos se divierten más

Isa Oriabure Andersson, quien ha enseñado en Västervångskolan desde 2007, testifica que las modificaciones acústicas han producido una gran diferencia para sus alumnos.

“Solían cansarse mucho más rápido y perder la concentración por la tarde. En lugar de escuchar a la profesora, se alborotaban. Ahora puedo hacer más, sin necesidad de levantar mi voz. El ambiente es cómodo, y los alumnos se divierten más ".

No todos los pasillos han instalado nuevos absorbentes acústicos, y la diferencia es notable.

"Tan pronto como salgo del aula, tengo la impresión de que hay muchos más alumnos en el pasillo, pero no hay tantos, es la sensación que me crea el ruido".

Obteniendo más provecho de las clases

Elin Lundgren, una alumna de 14 años en el año 8, lo describe como entrar en una burbuja donde puede concentrarse mejor. Solía escuchar música con sus cascos para evitar el ruido de fondo cuando intentaba trabajar en clase. Sin embargo, ya no lo necesita. 

"Es más divertido cuando todos están comprometidos y hacen lo que se supone que deben hacer. Me encanta que haya tranquilidad mientras trabajamos. Todos podemos concentrarnos mucho más rápido y sacar más provecho de nuestras clases. Hacemos más trabajo en la escuela en lugar de tener que llevarlo a casa."

Andreas Hellmer cree que un buen ambiente acústico facilita la realización de clases de acuerdo con el plan de aprendizaje.

“Los maestros tienen que tomar la iniciativa en la creación de un entorno propicio para trabajar y estudiar. Pero las condiciones deben ser correctas, sin interrupciones, por ejemplo. Los niños se desenvuelven bien cuando los niveles de sonido son los adecuados. Eso no significa que tenga que ser un silencio total. Deben poder tener debates en grupos pequeños sin molestarse unos a otros."

Los efectos de las investigaciones

Las modificaciones en Västervångskolan han captado mucho interés en el mundo en general. La Universidad de Lund ha lanzado un proyecto de investigación para estudiar cómo el entorno acústico afecta las acciones de los profesores y la capacidad de aprendizaje de los alumnos. Para empezar, los investigadores están capacitando a los maestros sobre cómo usar activamente la voz y la comunicación como parte del proceso de enseñanza. El estudio involucra a maestros que trabajan en aulas modificadas acústicamente y no modificadas por igual. Los investigadores continuarán estudiando las diferencias entre los entornos en términos de cómo se comportan los maestros, cómo se sienten y se desempeñan los alumnos, y cómo perciben a su maestro. Las herramientas que se utilizarán incluyen los medidores que usan los maestros alrededor del cuello, que miden tanto la voz del maestro como el nivel de ruido ambiental en la sala.

“Este estudio está diseñado para el mundo real. Esperamos demostrar que los niños se desempeñan y se sienten mejor en un buen ambiente acústico ", explica Viveka Lyberg Åhlander, profesor asociado de patología del habla y el lenguaje en la Universidad de Lund.

“También queremos producir algunas pautas sobre el buen diseño de la escuela y resaltar los beneficios educativos de un buen ambiente acústico.”

Las remodelaciones acústicas continuan

No contento con mejorar solamente la acústica en sus aulas, Västervångskolan ha instalado absorbentes de sonido y alfombras higiénicas de fieltro en su salón de actos, donde han notado una gran diferencia. La siguiente etapa incluirá modificaciones acústicas en las paredes y el techo del vestíbulo de la escuela, donde se encuentra una cafetería. El objetivo también es mejorar el entorno acústico en todos los pasillos.

“Si queremos que nuestros alumnos consideren importante la escuela, debemos demostrar por qué. Tenemos que transmitir la importancia de adquirir conocimientos y asistir a clases, lo que significa que debemos ofrecer el mejor ambiente de aprendizaje posible", dice Andreas Hellmer.

Texto: Lars Wirtén

Fotografía: Teddy Landén