Unidades suspendidas
El uso de unidades suspendidas proporciona flexibilidad y multitud de soluciones acústicas a problemas relacionados con diseño acústico. Donde se usan unidades suspendidas para mejorar una mala acústica, unidades solitarias pueden crear el beneficio de efectos de difracción, al exponer un área grande de parches de absorción al espacio de sonido. Ambos efectos pueden ser usados para aumentar las propiedades de absorción de sonido.
En ambientes grandes y ruidosos, como por ejemplo áreas de planta abierta, restaurantes, centros comerciales, etc., se puede instalar unidades suspendidas cerca de áreas laborales u otras ubicaciones en donde se necesitan tratamiento acústico para obtener condiciones apropiadas para comunicación, concentración o recuperación. Estas zonas pueden, por ejemplo, ser recepción, punto de información, comedor, incluidos en lugares grandes y ruidosos.
En aquellos establecimientos en los que, por varias razones, no se puede utilizar un único techo, p.e. cuando la temperatura se regula mediante vigas (activación núcleo de hormigón) o donde hay grandes áreas de vidrio, las islas absorbentes son una manera de crear entornos acústicos aceptables. Las islas absorbentes se pueden diseñar como baffles o unidades suspendidas horizontalmente.
Las islas absorbentes también se pueden utilizar cuando los techos absorbentes no proporcionan suficiente absorción. Si se complementan con absorbentes suspendidos horizontales o baffles, el entorno acústico puede mejorar con una reducción del nivel de sonido y una disminución del sonido conforme aumenta la distancia.
Alrededor de una unidad suspendida, se manifiesta el efecto acústico como:
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Reducción de ruido alrededor de unidades suspendidas
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Inteligibilidad del habla incrementado y C50
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Temprano tiempo de pudrición más corto (TTP)
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Oído direccional aumentado
En espacios de plantas abiertas se puede usar las unidades suspendidas como un complemento de techo acústico pared-a-pared. Al instalar unidades suspendidas por encima de lugares laborales se consigue, aparte de los efectos arriba mencionados, una reducción de propagación de sonido a través de largas distancias y también se contribuye a mejorar la intimidad entre grupos de trabajos
Los efectos subjectivos de unidades suspendidas son:
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Incrementar el confort de hablar y escuchar
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Reducir el estrés y símptomas relacionas con el estrés
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Menos esfuerzo vocal
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Más fácil poder concentrarse
En aquellos casos en los que se utilizan las unidades suspendidas como islas en solitario sobre los puestos de trabajo, los absorbentes se deben instalar lo más cerca del puesto de trabajo como sea posible, aumentando así el efecto protector. Las unidades suspendidas deberían cubrir el área de trabajo, con una ligera superposición.
Instalación alta
Instalación baja
Cuando se utilizan las unidades suspendidas como complemento al techo acústico de pared a pared, es mejor dividir estas unidades en unidades más pequeñas y distribuirlas sobre el área total del techo que utilizar unidades grandes de forma irregular. La división en partes más pequeñas reforzará el efecto difractor y contribuirá a ampliar el campo de difusión del sonido.
Si el puesto de trabajo está cerca de paredes reflectantes, se recomienda utilizar absorbentes de pared como complemento a las unidades en suspensión.
Las unidades en suspensión incrementan la capacidad para localizar las fuentes de sonido en las cercanías de un puesto de trabajo. Así se aumentará la sensación de control y se creará un ambiente menos estresante.